Iniciamos Nuestra oración en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen.
·En aquellos tiempos, como hoy, el mismo fenómeno: había que emigrar para poder sobrevivir. Tú, María y José, con Jesús, conocisteis el desarraigo, la soledad en otra cultura, el riesgo y aventura peligrosa… Y había que hacerlo para que el “niño» pudiera tener futuro.
Texto del Evangelio según san Mateo 2, 13-15 19-21
Cuando ya los sabios se habían ido, un ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: “Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.”
José se levantó, tomó al niño y a su madre y salió de noche con ellos camino de Egipto, donde estuvieron hasta que murió Herodes.
Después de la muerte de Herodes, un ángel del Señor se apareció en sueños a José, en Egipto, y le dijo: “Levántate, toma al niño y a su madre y regresa a Israel, porque ya han muerto los que querían matar al niño.”
José se levantó, tomó al niño y a su madre y volvió a Israel. Pero cuando supo que Arquelaogobernaba en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá; y habiendo sido advertido en sueños por Dios, se dirigió a la región de Galilea. Al llegar, se fue a vivir al pueblo de Nazaret.
Hoy recordamos las palabras de Jesús en las Bienaventuranzas.
La bienaventuranza de los perseguidos:
“Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos”.
Oración: Hoy recordamos las palabras de Jesús en las Bienaventuranzas.
“Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos”.
Te pedimos que, como María, sepamos escuchar las palabras de Cristo, que, como María, sepamos y queramos comprometernos en el espíritu de las Bienaventuranzas para poder ver las pequeñas o grandes injusticias que hay a nuestro alrededor y colaborar en su solución. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
Pregunta: ¿Qué puedo hacer para ayudarles… para evitar que esto siga ocurriendo en el siglo XXI?
En un rato de silencio- oración hacemos presentes a todos los refugiados de hoy día y nos dirigimos a nuestro Padre, diciendo: Padre Nuestro…Dios te Salve María…y Gloria al Padre…