Buenos días Familia, nos ponemos en presencia de Dios y de la Virgen, en el nombre del Padre,
del Hijo, del Espíritu Santo.
MOTIVACIÓN
Después de pensar estos días qué cosas debemos cambiar, vamos a seleccionar cuatro
que son muy importantes, tiempo de viajar hacia dentro, hacia nuestro interior.
Compartimos el Evangelio del día de hoy:
Lectura del santo evangelio según san Lucas 24, 35-48
En aquel tiempo, los discípulos de Jesús contaron lo que les había pasado por el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.
Estaban hablando de estas cosas, cuando él se presentó en medio de ellos y les dice:
«Paz a vosotros».
Pero ellos, aterrorizados y llenos de miedo, creían ver un espíritu.
Y él les dijo:
«¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro corazón? Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un espíritu no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo».
Dicho esto, les mostró las manos y los pies. Pero como no acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos, les dijo:
«¿Tenéis ahí algo de comer?».
Ellos le ofrecieron un trozo de pez asado. Él lo tomó y comió delante de ellos.
Y les dijo:
«Esto es lo que os dije mientras estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo escrito en la Ley de Moisés y en los Profetas y Salmos acerca de mí».
Entonces les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras.
Y les dijo:
«Así está escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se proclamará la conversión para el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto». PALABRA DEL SEÑOR.
ORACIÓN
Querido Jesús te pido que me ayudes a estar muy atento y cambiar todas las cosas que me
permitan tener el corazón limpio y preparado para acercarme más a ti. Amen.
Finalizamos nuestra oración rezando juntos, Padre Nuestro…Dios te Salve María…y Gloria al Padre…