¡¡¡Buenos días Familia!!!
Iniciamos esta jornada diciendo juntos, en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo. Amen.
Reina del cielo alégrate; aleluya.
Porque el Señor a quien has merecido llevar; aleluya.
Ha resucitado según su palabra; aleluya.
Ruega por nosotros al Señor; aleluya.
Alégrate, Virgen María; aleluya.
Porque ha resucitado el Señor; aleluya
Lectura del santo Evangelio según San Juan 17,20-26.
En aquel tiempo, levantando los ojos al cielo, Jesús dijo: Padre santo: de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también lo sean en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. También les di a ellos la gloria que me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno: yo en ellos y tú en mí, para que sean completamente uno, de modo que el mundo sepa que tú me has enviado y los has amado como me has amado a mí. Padre, éste es mi deseo: que los que me confiaste estén conmigo, donde yo estoy y contemplen mi gloria, la que me diste, porque me amabas antes de la fundación del mundo. Padre justo, si el mundo no te ha conocido, yo te he conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste. Les he dado a conocer y les daré a conocer tu Nombre, para que el amor que me tenías esté en ellos, como también yo estoy en ellos. Palabra del Señor.
COMENTARIO
Todos somos uno. Igual que Dios, Jesús y el Espíritu Santo son uno. Nosotros, los hijos de Dios, tenemos que ser uno. Dios nos ama a cada uno de nosotros y somos únicos a sus ojos. Igual nos debemos mirar entre nosotros. Amarnos y amar a la unidad que son Dios y Jesús. Demos gracias a Dios por su amor infinito por nosotros porque como Padre es capaz de hacer cosas maravillosas por sus hijos. Así lo demostró mandando a su Hijo y resucitándolo. Nunca nos abandonará como no abandonó a Jesús.
Finalizamos nuestra Oración diciendo juntos Padre Nuestro…Dios te Salve María…y Gloria al Padre