Buenos días, nos ponemos en presencia de Dios y de la Virgen, en el nombre del Padre,
del Hijo, del Espíritu Santo. Amen.
Señor, donde sea que yo esté ¡encuéntrame siempre!
(Lc 15; 4-6).
REFLEXIÓN
Jesús nos quiere a todos por igual, y si por cualquier
motivo estamos perdidos, él irá a buscarnos porque para
él todos somos importantes.
¡Qué bonito es saber que somos de Él! que conoce
nuestro nombre y nos llama por él. Déjate encontrar por
Jesús.
Terminamos Nuestra Oración diciendo juntos; Padre Nuestro…Dios te Salve María…y Gloria al Padre.