¡Buenos días!
Comenzamos esta oración en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen
Se puede leer primero individualmente, después, repetir en voz alta la frase que más les ha gustado y terminar leyéndola entera en voz alta todos juntos.
ENSÉÑAME A REZAR
Jesús, maestro y amigo.
Me gusta charlar contigo,
decirte mis cosas,
contarte lo que me pasa,
pedirte consejos
o, simplemente, cantarte un rato.
Enséñame a rezar,
con ganas y entusiasmo,
todas las mañanas,
todas las noches.
Que no me olvide
de hablarte un momento
cada día,
para encontrarme contigo,
pedirte por mi familia,
darte gracias por la vida
y decirte
que te siento cerca mío,
caminando a mi lado siempre.
DECIMOS TODOS JUNTOS:
PADRE NUESTRO…
DIOS TE SALVE MARÍA…
GLORIA AL PADRE, AL HIJO Y AL EL ESPÍRITU SANTO…
Evangelio según san Juan
Porque tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Unigénito, para que todo el que cree en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
Palabra del señor
Reflexión
En lo del amor… hay que empezar por Dios Padre, que tanto amó al mundo que le envió a su Hijo. Hay que seguir por su Hijo Jesús, que fue capaz de no hacer alarde de su categoría de Dios y tomar la condición de esclavo, para que viéramos con más claridad que había venido a servirnos y no a ser servido. Y nos sirvió, no desde la altura divina, sino desde su condición humana, llenándonos de luz y predicándonos su buena noticia, gastando su vida en indicarnos el camino que nos lleva a vivir con vida, con sentido, con esperanza en esta tierra antes de desembocar en la vida de felicidad total después de nuestra muerte y resurrección.