¡Buenos días!
Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Al comenzar este momento de oración pienso en Jesús, en que me quiere enseñar un montón de cosas, como a sus amigos. En el evangelio que vamos a escuchar, que es el de ayer domingo, Jesús pide a Simón y a Andrés que sean sus amigos… Como también nos lo dice a nosotros. Os invitamos a leer el texto adaptado que proponemos a continuación y a ver el siguiente vídeo: https://youtu.be/_zFSihWVHWI
LECTURA: VUELTA A GALILEA Y PRIMEROS DISCÍPULOS (cf. Mt. 4, 12-23)
Herodes mandó arrestar a Juan y meterlo
en la cárcel, porque le molestaba lo que
decía. Cuando Jesús se enteró, se marchó
de la zona y se fue a Galilea. Vivía junto al
lago. Era lo que habían anunciado los
profetas. Entonces empezó a predicar,
y le decía a la gente: «Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos».
Un día, junto al lago, vio a dos hermanos, Simón y Andrés, que estaban preparándose para pescar. Les dijo: «Venid conmigo, y seréis pescadores de hombres». Ellos se miraron, y no lo dudaron. Bajaron de la barca y se fueron con él. Y lo mismo pasó con Santiago y Juan, otros dos hermanos. Así, Jesús iba juntando un grupo de amigos que iban con él. Y anunciaba el reino de Dios y curaba las enfermedades y dolencias de la gente.
REFLEXIÓN:
– Cierra los ojos y piensa en los nombres de tus amigos en un momento. Después piensa por qué has elegido a esos amigos.
– Jesús elige a sus amigos porque eran buenas personas que deseaban amar a Dios y a los demás. Eran personas que deseaban amar a los más necesitados.
– Damos gracias por ellos
Padre nuestro…
Dios te salve María…
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo…