¡Buenos días!
Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Señor, te damos gracias por los hombres que trabajan en paz
y los que construyen un mundo más feliz.
Sin embargo, a menudo vemos en la televisión, niños, mujeres y hombres que sufren.
Tienen hambre, están heridos por la guerra, acribillados por bombas y fusiles. También vemos, a veces, hombres y mujeres que se sacrifican por los que sufren, y les ayudan a aliviarse.
Luchan contra el mal, sonríen a los que temen y a los débiles les infunden aliento y esperanza.
Señor, cuando se ama de verdad,
el sufrimiento es menos pesado de llevar, las injusticias retroceden y las rencillas se apagan.
Enséñanos a amar, a luchar, a sonreír para que llegue a nosotros la paz y la amistad, para que florezca la esperanza en el corazón de todos y cada uno.
Enséñanos a amar y respetar a todos los miembros de nuestra familia.
Terminamos con una canción oración… que bien se está cuando se está bien (Hakuna)
Padre nuestro…
Dios te salve María…
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo…