¡Buenos días!
Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
UN PASTOR SE UNIDO
“Los pastores, que velaban sus rebaños, se decían entre ellos: «Lleguémonos a Belén a ver esto que ha pasado y que el Señor nos ha hecho saber»”
Este personaje que se ha unido al grupo nos resulta simpático y entrañable por su rápida respuesta al llamamiento y al anuncio del ángel: deja su manada y va rápido a comprobar aquello que el ángel le dice. También por su generosidad: lleva lo que tiene al Niño.
Los pastores, dicen que, en tiempo de Jesús, como ahora, eran personas marginales y marginadas, sin importancia, porque vivían en el campo, lejos de la vida de la ciudad. Pero aquí les vemos que están disponibles y atentos a la buena noticia que se les comunica.
Hoy en día hay también «pastores» a nuestro alrededor. Gente que aquí echa una mano cuando se lo necesita; que deja sus cosas, por muy importantes que sean, y va allá donde se lo piden…
En esta Navidad queremos ser personas con vocación de «pastores», es decir, gente que vive atenta en las necesidades del entorno donde vive.
Oración: Como los pastores
Como los pastores quiero estar en vela, Señor,
Quiero estar en vela y en camino
Quiero estar en salida, dejando mi egoísmo.
Que, el tiempo en el que vivo, no me impida ver el futuro
Que, mis sueños humanos, no eclipsen los tuyos, solidarios
Que, las cosas efímeras, no las anteponga a las que dan plenitud.
Quiero estar en vela y en camino
Y que, cuando nazcas, yo también pueda velarte
Y que cuando nazcas, podamos también adorarte
que, cuando vengas, salga a recibirte con presteza
Y que, cuando llores, te pueda arrullar con ternura.
Atrévete a soñar (Claretianas) https://youtu.be/Y2nub04H_pk
Padre nuestro…
Dios te salve María…
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo…