¡Buenos días!
Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
TIERRA NUEVA
Hoy os proponemos comenzar nuestro día con un texto del último libro de la Biblia, el Apocalipsis, que nos invita a vivir haciendo todo nuevo.
“Vi un cielo nuevo y una tierra nueva. El primer cielo y la primera tierra han desaparecido, el mar ya no existe. Vi la Ciudad Santa, la nueva Jerusalén, bajando del cielo, de Dios, preparada como novia que se arregla para el novio. Oí una voz potente que salía del trono: —Mira la morada de Dios entre los hombres: morará con ellos; ellos serán su pueblo y Dios mismo estará con ellos. Les enjugará las lágrimas de los ojos. Ya no habrá muerte ni pena ni llanto ni dolor. Todo lo antiguo ha pasado. El que estaba sentado en el trono dijo: —Mira, renuevo el universo. Y añadió: —Escribe que estas palabras mías son verdaderas y fidedignas. Y me dijo: —Se acabó. Yo [soy] el alfa y la omega, el principio y el fin. Al sediento le daré a beber de balde del manantial de la vida. El vencedor heredará todo esto. Yo seré su Dios y él será mi hijo.” (Ap 21, 1-9)
En la tierra nueva
las casas no tienen llaves
ni los muros rompen el mundo.
Nadie está solo.
No se habla mucho del amor,
pero se ama con los ojos,
las manos y las entrañas.
Las lágrimas son fértiles,
la tristeza se ha ido
para no regresar,
y se ha llevado con ella
la pesada carga
del odio y los rencores,
la violencia y el orgullo.
Aclamación: Muéveme: https://youtu.be/rrKzxMA4XQQ
Decimos todos juntos:
PADRE NUESTRO…
DIOS TE SALVE MARÍA…
GLORIA AL PADRE, AL HIJO Y AL ESPÍRITU SANTO…