¡Buenos días familia! ¡Alelulya, Cristo resucito!
Con esa alegría que Jesucristo resucito empecemos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Observamos el siguiente video:
Escuchemos con atención:
Es difícil arriesgar la vida
Difícil creer que es perdiéndola
como la encontraremos.
Pero aún es más difícil
Arriesgarnos a quedarnos sin nada,
sin nada más que tu amor como tesoro.
Sabemos que lo más grave
no es marcharse lejos, sino no arriesgar en volver.
Lo más duro del que se aleja es no reconocerte,
que tú siempre estás cerca
para arrollarnos con tu abrazo de pies a cabeza.
Ayúdanos, a vivir con la certeza
de que apostando por el amor, por tu amor,
Ariesgando la vida hasta el final
es la prueba del amor mayor.
Que en el mar inmenso de la vida
no nos quedemos nunca en la orilla,
ni nos paremos cuando el agua nos llega a los tobillos;
sino arriesgarnos mar adentro
donde la luz es más pura
y el agua más azul… y estás tú. AMEN
(Los otros Salmos. Joaquín Suárez Bautista)
Todos juntos decimos…
PADRE NUESTRO…
DIOS TE SALVE MARIA…
GLORIA AL PADRE, AL HIJO Y AL ESPIRITU SANTO…