¡Buenos días!

Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen

El segundo domingo de Cuaresma, en la Eucaristía escucharemos el siguiente pasaje del Evangelio de San Lucas.

Lucas 4, 1-13

En aquel tiempo, Jesús cogió a Pedro, a Juan y a Santiago y subió a lo alto de la montaña, para orar. Y, mientras oraba, el aspecto de su rostro cambió, y sus vestidos resplandecieron. De repente, dos hombres conversaban con él: eran Moisés y Elías, que, apareciendo con gloria, hablaban de su muerte, que iba a consumar en Jerusalén. 

Pedro y sus compañeros se caían de sueño; y, espabilándose, vieron su gloria y a los dos hombres que estaban con él. Mientras éstos se alejaban, dijo Pedro a Jesús: «Maestro, qué bien se está aquí. Haremos tres tiendas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.» No sabía lo que decía. 

Todavía estaba hablando, cuando llegó una nube que los cubrió. Se asustaron al entrar en la nube. Una voz desde la nube decía: 

—«Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle.» 

Cuando sonó la voz, se encontró Jesús solo. Ellos guardaron silencio y, por el momento, no contaron a nadie nada de lo que habían visto.

PALABRA DEL SEÑOR.

Vamos dando un nuevo sentido a este momento de cuaresma. Compartir lo que Dios va poniendo en nuestros corazones con pequeñas oraciones y peticiones espontaneas (de los estudiantes)…

^{Juan Luis Guerra Escucha Señor mi oración}

Terminamos diciendo:

Padre nuestro…

Dios te salve María…

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo…