Iniciamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen
Jesús, en la Pascua nos enseñas que la vida
triunfa sobre la muerte.
Con tu entrega hasta el final
cumpliste la voluntad del Padre,
y nos mostraste que la fidelidad pasa por la cruz.
La cruz del dolor y la persecución.
Ayúdanos a ser fieles,
que no bajemos los brazos en las dificultades,
y cuando nos toque vivir alguna cruz
confiemos como Tú en la ayuda del Padre.
Señor de la Vida enséñanos a vivir
más cerca del Reino en las cosas de todos los días. Amen
Decimos juntos:
Padre nuestro…
Dios te salve María…
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo…